Poema Armonías
(En el Cincuentenario de la proclamación del Dogma de la Inmaculada Concepción – 8 de Dic.-1904)
¡Oh yo quisiera como el follaje
que habla si el viento murmurador
sacude y mece su verde encaje,
en ese innato, mudo lenguaje,
decirte ¡oh Madre! que eres mi amor!.
¡Ah yo quisiera cual de la fuente
las ondas diáfanas del cristal,
cantar sin tregua, con voz doliente,
mientras se aleja con la corriente,
cantar tu gloria, Reina inmortal!.
¡Ah yo quisiera como la brisa
que por las tardes se oye gemir,
y allá a lo lejos, volando a prisa,
se desvanece vaga… indecisa…
por Ti quisiera de amor morir!.
¡Ah yo quisiera cual golondrina,
hasta los Cielos rauda volar,
y descorriendo su azul cortina
tu bello rostro ¡Virgen divina!
absorta en éxtasis contemplar!.