XXXII Semana del Tiempo Ordinario 2016

CICLO C – 06 DE NOVIEMBRE – 2016

 ENTRADA: Queridos hermanos bienvenidos a la celebración de la Eucaristía.

La esperanza cristiana no se opone a las esperanzas humanas, sino que las asume y las trasciende, porque es confianza que se abre a Dios y a sus promesas.

La celebración hoy nos propone ser capaces de acrecentar nuestra fe y nuestra confianza en Dios. Nos ponemos en pie y acompañamos con el canto de entrada.

PRIMERA  LECTURA: (2Mac.7,1-2.9-14)

Los siete hermanos Macabeos apoyados de su madre, confían en Dios y en la resurrección de los muertos que los anima a permanecer fieles a Dios incluso a dar su vida por Él. Escuchemos.

SALMO RESPONSORIAL (Sal.16)

El salmo 16, nos invita a reconocer que debemos ansiar esa vida de intimidad con Dios al ejemplo del salmista que en medio del peligro busca la amistad de Dios. Respondemos con la antífona: “Al despertar me saciaré de tu semblante, Señor.”

 SEGUNDA LECTURA (2 Tes. 2,16-3,5)

Los cristianos no hemos de sentir temor ante el fin de los tiempos, lo importante es tener la fuerza de Dios “para toda clase de palabras y obras buenas”. Escuchemos.

EVANGELIO (Lc.20,27-38)

Jesús se remontó al más antiguo testimonio de Moisés para fundamentar su doctrina acerca de la vida eterna y la resurrección de los muertos. Nos ponemos en pie y entonamos el aleluya.

 PRECES A cada petición respondemos: ¡Señor, danos tu esperanza!

 1. Oremos por la Santa Iglesia, por el Santo Padre el Papa, los obispos y sacerdotes, para que en todo momento anuncien al Dios de la vida, como el fundamento de vida para todos los hombres. Roguemos al Señor.

2. Oremos por nuestros gobernantes, para que crezcan en solidaridad con los más desfavorecidos y necesitados. Roguemos al Señor.

3.  Oremos por todos los cristianos, para que seamos servidores de la vida y colaboradores con ella en el respeto y cuidado hacia nuestros hermanos. Roguemos al Señor.

4. Oremos por todos los que agentes pastorales y catequistas que laboran en nuestra parroquia, para no tengan miedo de anunciar la Palabra de Jesús. Roguemos al Señor.

 OFRENDAS:

Ofrecemos al Señor nuestra esperanza por un mundo mejor, para que, junto con el pan y el vino, se transforme en semilla de la Novedad del Reino. Acompañamos este momento cantando.

COMUNIÓN:

Acerquémonos a la mesa a compartir juntos el Pan de Vida, que mantiene activa nuestra esperanza. Acompañamos este momento cantando.

DESPEDIDA:

Que la alegría de sabernos partícipes de la promesa de Dios nos anime a ser testigos de la esperanza en la realidad de todos los días. Nos despedimos cantando.